Nada para nadie, a rematar en nuestra cancha

Chivas hizo el viaje al Estadio Azteca por tercera vez en el semestre, con muchas expectativas alrededor tras el ya célebre 3-0 en temporada regular y la semifinal de Copa MX dónde se ganó en penales, por lo que se abría una tercera oportunidad para humillar al rival odiado en su Centenario pero sobre todo, iniciar el camino de buena manera hacia la posibilidad de lograr el ansiado doceavo título. Sin embargo en los primeros 90 minutos, Chivas no pudo repetir el mismo nivel de juego mostrado en las dos anteriores citas con el América.

El Guadalajara empezó mejor los primeros 10 minutos tratando de presionar al América desde la salida pero cuando eso funcionó los últimos 2 partidos ante dicho rival, era natural que hubiera ajustes de parte de los de amarillo, quienes al jugar con línea de 5 no dejaron al Guadalajara desplegar su juego por las bandas provocando que Brizuela y Cisneros pasaran desapercibidos en la primera mitad, poco a poco América metió en su juego a Chivas y justamente en una pared larga entre William da Silva y Silvio Romero ayudados por una tremenda pasividad defensiva por parte de los rojiblancos encontraron el primer gol del juego.

Chivas cayó en la desesperación y por momentos parecía ser un equipo en jornada 1 con pases de rutina fallados y siendo incapaces de generar peligro, dado que tanto Michael Pérez y Orbelín Pineda dieron un primer tiempo malísimo y los de Coapa constantemente atacaron nuestra banda izquierda donde el ‘Aris’ Hernández fue bailado en varias ocasiones, raro partido malo del usualmente sólido 6 rojiblanco. Pero justo en el tiempo de compensación Chivas pareció que empezaba a encontrarse futbolísticamente, tras una jugada colectiva donde el cuestionado ‘Gullit’ Peña disparó al poste, el mismo ‘Gullit’ disputando un balón en el área americanista fue desplazado por un defensor provocando el penal que Salcido convertiría por gol para ir al vestuario 1-1, un marcador generoso para lo mal que se vio el Rebaño en los primeros 45 minutos.

En el segundo tiempo los de Coapa generaron varias de peligro los primeros minutos aunque Chivas también haría lo propio tras una gran jugada individual de Pulido entre 2 defensores americanistas pero su disparo fue atajado por el Boiler Muñoz. En el transcurso del partido fue notorio que los cambios tácticos de La Volpe y el cansancio empezaron a mermar en el América, Chivas fue nivelando las acciones y los cambios de Almeyda fueron correctos, el Gallo Vázquez aportó la solidez que hoy le faltó a Michael Pérez y la Chofis se vio participativo aunque no realmente preciso, algo que fue ganancia tomando en cuenta que Isaac Brizuela hoy hizo su mejor imitación de Xavi Báez y fue un fantasma sobre el césped accidentado del Azteca. El mismo Gallo Vázquez justamente generó con un muy buen pase a Alan Pulido la mejor jugada colectiva del Guadalajara en el partido cuando lo dejó relativamente libre en el área pero de espaldas al arco, intentó anotar de media tijera pero su disparo pasó desviado. Rodolfo Cota quitando una jugada donde arriesgó de más con los pies, tuvo también un buen partido con un par de buenas intervenciones destacando una donde le quitó una opción clara de gol a Arroyo. Chivas acabó el juego siendo ligeramente mejor.

En conclusión, un buen resultado tomando en cuenta que el equipo tuvo un mal partido colectivo y donde también faltó la intensidad que se mostró en el Clásico de temporada regular. Preocupa la nula participación de Cisneros y Brizuela ya que el juego por las bandas de Chivas hoy fue prácticamente inexistente pero sobre todo, Orbelín Pineda también tuvo una noche desafortunada en Santa Úrsula, poco fino y desubicado por momentos, y en su caso afecta más porque es un jugador clave en el esquema táctico de Almeyda al ser el enlace en media cancha. Dicho esto, por supuesto que viendo el marcador, es un resultado muy favorable para nosotros, será primordial conservar el cero atrás ya que Chivas con este resultado avanzaría a semifinales, pero mucho tendrá que mejorar futbolísticamente no solo para seguir avanzando, sino para aspirar al título, porque al menos hoy, Chivas no jugó como un equipo contendiente.