La afición está molesta. El director deportivo del Rebaño, Francisco Gabriel de Anda dio ya dos conferencias de prensa, en una para hablar de que el equipo está en una fase de ‘consolidación financiera’ y que ‘se acabó la gallina de los huevos de oro’, en la segunda habló de un tope de 8 millones de dólares por compra de jugadores además que aceptó que Matías Almeyda se encuentra inquieto por la conformación del plantel pero que ‘quiere a Matías comprometido’ a pesar de no poderle traer a los jugadores que pidió abriéndole prácticamente la puerta del club, rematando además con la tétrica frase que todo aficionado de Chivas odia ‘tienes qué jugártela con los chavos’.
Esto deja a la afición preocupada, en medio de rumores, las ya confirmadas salidas de Rodolfo Cota y Oswaldo Alanís más otros rumores que ya todos conocemos (pero que de Anda ha desmentido, por ahora), es imposible no pensar que esta película ya la vimos antes, la última ocasión que Chivas había quedado campeón en 2006, pasaron cosas similares los torneos siguientes. Repasemos un poco lo que sucedió en aquel entonces.
Unos días después del campeonato en Toluca y a pesar de que Jorge Vergara y el mismo Oswaldo Sánchez, capitán y figura del Rebaño en aquel entonces habían negado los rumores de una posible salida del cancerbero del equipo por temas económicos, Oswaldo apareció en una conferencia de prensa para anunciar que se iría al Santos, diciendo que a pesar de que le quedaba contrato de año y medio por delante, debido a que tanto directiva como jugador necesitaban el movimiento por temas económicos. Al final, buena parte de la afición nunca le perdonó a Oswaldo irse a Torreón y lo tachó de mercenario, otros culparon enteramente a la directiva.
A pesar de la salida de Oswaldo, Chivas tuvo un buen torneo pero fue eliminado por el odiado y asqueroso rival de Coapa en semifinales, la eliminación fue dolorosa y la directiva decidió entonces vender a dos jugadores titulares: Diego Martínez y Adolfo ‘Bofo’ Bautista poniéndolos como chivos expiatorios de la eliminación, el último incluso como capricho personal de José Manuel ‘Chepo’ de la Torre quien hasta puso su renuncia en la mesa si no se marchaba el ‘Bofo’, a pesar de que Jorge Vergara luego diría que él no estaba de acuerdo, pero que prefirió conservar al ‘Chepo’ y a Néstor de la Torre.
El ‘Chepo’ fue cesado tras un flojo inicio de torneo y se le decidió dar oportunidad a Efraín Flores, quien estaba como jefe de fuerzas básicas de Chivas de inicio como interino, pero coincidió también con la llegada de *toca madera* Angélica Fuentes quien inició como ejecutiva en Omnilife y en Chivas, en ese entonces salieron varias piezas claves de la directiva como Juan José Frangie, directivo general de Chivas en aquel entonces y encargado del área comercial del equipo, junto con él se fueron también Olimpia Cabral (encargada de mercadotecnia) entre otros jefes dentro de Omnilife debido a que la ‘Reina del Gas’ llegó con la consigna de abaratar nóminas tanto en la empresa de polvitos mágicos y posteriormente Chivas… No caían refuerzos debido a que la directiva había adoptado el lema ‘nos la jugamos con los jóvenes que vienen apretando fuerte’.
Efraín acabó quedándose tras acabar cuarto en el Apertura 2007 y caer en semifinales, el siguiente torneo Chivas acabaría superlíder pero terminaría siendo echado de manera humillante por Rayados en cuartos de final (8-5 global), entonces salieron el traidor del ‘Maza’ Rodríguez y el goleador del equipo, Omar Bravo quien acababa contrato para irse al Deportivo La Coruña, otros dos jugadores titulares clave e incluso estuvo cerca de irse un tercero, ya que la directiva había negociado la venta de Gonzalo Pineda al Atlante pero éste se negó a irse al equipo de Cancún.
El siguiente año Chivas no calificaría a la liguilla en dos torneos seguidos y los fichajes que se consiguieron ninguno rindió. Del once titular que jugó la final ante Toluca, en el Apertura 2008 sólo quedaban en la plantilla 6 (Reynoso, Magallón, Morales, Araujo, Pineda y Medina). Los siguientes años si bien aparecería un Javier Hernández (que tampoco duró mucho en el equipo), tuvimos que ver desfilar a jugadores de la talla de Édgar Solís, ‘Chore’ Mejía, Xavier Báez, Kristian Álvarez, etc., que acabaron ocasionando que Chivas de pronto estuviese peleando el descenso en 2015.
En 2018 ya estalló el escándalo de las famosas primas del doblete y problemas financieros de Vergara (tanto personales y como en Omnilife, gracias a la bruja juarense), el club se puede decir que ha perdido dinero por Chivas TV, juicios legales de Vergara además de un problema ante el SAT y un año después del título 12, estamos hablando de que con toda seguridad no habrá incorporaciones importantes pero no se descarta que salga algún otro jugador importante, puesto a que ‘los jóvenes vienen apretando fuerte’. También han ocurrido despidos en la administración del equipo sobre todo en el área de mercadotecnia. La directiva aún está a tiempo de corregir el problema, pero los antecedentes no permiten ser optimistas y sobre todo, está ese ambiente de Déjà vu, justo cuando parecía existir un proyecto sólido y cuando estamos por jugar un mundial de clubes.
Claro que es distinto que hoy el trabajo en básicas sea supervisado de cerca por Matías Almeyda y no por los peleles pusilánimes de Efraín Flores y José Luis Real, sin embargo, el equipo cuando realmente ha sido campeón es cuando se le ha invertido en incorporaciones de jugadores de fuera que apuntalen al plantel, Chivas tenido problemas para consolidar a sus canteranos y eso no es ningún secreto, pero tal parece que la directiva no aprendió la lección del primer título de la era Vergara y un club como el Guadalajara no puede conformarse con solo ‘calificar a la liguilla’ o ser protagonista de vez en cuando. Ojalá la historia sea otra, sin embargo, los signos apuntan hacia una dirección que ya vimos antes y no fue bueno para el club.