Chivas llegaba a la final tras una liguilla de ensueño, si bien terminó accediendo a ésta vía repechaje derrotando con autoridad al Veracruz, en cuartos de final dio cuenta del Cruz Azul y en semifinales para nuestro beneplácito, se echó al América. La final sería ante el Toluca, un equipo que había sido habitualmente nuestro verdugo en instancias decisivas y en el juego de ida, el Rebaño empató a 1 con los Diablos en el Estadio Jalisco, por lo que si el Guadalajara quería ser campeón, tendría que ganar la vuelta en el Nemesio Diez, un estadio donde Chivas llevaba 9 años sin ganar y varias eliminaciones de liguilla a cuestas en dicho escenario.
Pero en nuestro año del Centenario, con un ayuno de 9 años y medio sin poder llegar al ansiado onceavo título, debía tener un desenlace diferente. El Toluca se puso arriba en el marcador en el primer tiempo con un gol de Bruno Marioni que complicaba más las cosas, y por primera vez en toda la liguilla, Chivas iba debajo en el marcador. Pero en el segundo tiempo las cosas cambiaron, y en una jugada de táctica fija, el Maza Rodríguez empató los cartones con un remate de cabeza, desde ese momento el trámite del partido nos favoreció, y más tarde en un trazo largo que recibió el Venado Medina, éste dejó el balón atrás para el Bofo que corría de frente de cara al área y de primera intención mandó un cañonazo sólido a segundo palo, abajo donde Hernán Cristante (hoy DT del Toluca) no pudo llegar y el Bofo, quien había perdido a su madre ese mismo año, lloró dedicándole el gol y dándonos a nosotros el onceavo título rojiblanco.
Así pues, esperando que hoy el Rebaño vuelva a imponerse al Toluca en una liguilla, les dejamos el recuerdo del onceavo título rojiblanco en su totalidad. Disfruten: